A las 22:00 horas de la noche anterior ya estabamos todos en el Albergue dormidos, además fue como en la mili, porque apagaron las luces, sin preguntar.
La noche la he pasado bien, teniendo en cuenta que la anterior estuve de viaje y di unas cuantas cabezadas en el autobús.
A las 06:00 h encendieron todas las luces, y arriba, vamos como la mili, mientras que un hospitalero decía: "Buenos días peregrinos".
Rápidamente preparé la mochila, me lavé la cara, desayuné un poco de fiambre, y a las 07:10 horas ya estaba en marcha.
A unos 2,8 kms estaba Burguete, que por cierto, mi hermano Antonio estuvo allí trabajando hace ya unos añitos.
Me senté en una terrazita mirando hacia las montañas y me tomé un cafelito.
Durante la marcha, bien. El 95% de los peregrinos son extranjeros. He caminado con un coreano de 63 años, Wan, y con un italiano de 25 años, Marco. Hablaban inglés, así que he practicado, ¡¡¡¡y hasta me entendían!!!!.
Cada uno va a su ritmo, y lo que tú ahora adelantas, después descansas y vuelves a encontrarte con los mismos. En fín, que durante todo el camino siempre vas viendo gente.
Nada más salir de Burguete comenzó a llover, por lo que hubo que parar para sacar de la mochila el poncho y prepararse. La mañana estaba genial para caminar, un poquito fresquita y con la lluvia, una gozada. Me encanta andar lloviendo.
Por cierto, el coreano Wan, me ayudo a colocarme el poncho, ¡¡¡¡ que amables son esta gente !!!. Luego me decía que no lo esperara, que andaba muy despacio, porque era su condición. Pero luego cuando paraba yo, volvía aparecer.
Coincidimos nuevamente cuando salió el sol y nos quitamos ropa de encima. Le dí unos frutos secos que llevaba; nueces, pasas y fruta escarchada. Le encantó.
Después coincidí un rato caminando con Eva de Alicante, por fin un español. Y un poquito mas adelante con otra española también de Alicante, Marga, y su hijo Borja.
Al llegar a Bizkarreta, paré en una tienda, y me compré un salchichón, una barra de pan, y una cerveza. Y me tomé un aperitivo. Había que reponer fuerzas porque eran ya las 11:00 de la mañana.
A partir de aquí, comenzó una subida al Alto del Valle del Erro, y después los últimos 3,5 kms antes de llegar a Zubiri, una bajada impresionante con un camino de piedras super peligroso para las rodillas.
A las 14:30 h llegué por fin a Zubiri, y directo al Albergue.
Comí un menú de peregrino, y después una ducha y a hacer la colada. Y ahora ya con los deberes hechos estoy escribiendo en el blog.
Os dejo una pequeña muestra fotográfica y dos vídeos.
Veo que estuviste con Pedro y su mujer y que te pegaste un homenaje antes de iniciar el Camino. Bueno, te veo fenomenal: practicas inglés, eres solidario con los compañeros de viaje, caminas bajo la lluvia, tienes unos paisajes impresionantes, en fin que me están dando ganas de ir para allá... es broma. Ánimo campeón.
ResponderEliminarPreciosas las fotos. La verdad es que es todo muy diferente a como se suelen ver los paisajes por aquí en el sur. Y si encima el tiempo acompaña y no hace calor es ya perfecto. Si el camino pasara por Sevilla, te aseguro que ahora mismo no habría nadie por aquí, porque esto es un horno. Te envidio por estar allí tan fresquito. Bueno, estoy deseando ya ver las fotos de mañana y que cuentes las anécdotas con la gente que vayas conociendo.
ResponderEliminarUn beso muy grande.